TEORÍA Y PRAXIS No.42 Vol. 1 Enero-Junio 2023 95
Revista de Ciencias Sociales
y Humanidades.
No.
42 ISSN 1994-733X, Editorial Universidad Don Bosco, year 21,
No.42, Vol. 1, January-June 2023, p. 95-99
ISSN 1994-733X, Editorial Universidad Don Bosco, año 21,
No.42, Vol. 1, Enero-Junio de 2023, p.95-99
Reseña de libro
Los procesos de independencia de
Centroamérica. Una interpretación de sus
proyectos en el Bicentenario, de Adolfo
Bonilla Bonilla
Juan Vicente Chopin1
Bonilla Bonilla, Adolfo. (2021). Los procesos de independencia
de Centroamérica. Una interpretación de sus proyectos en el
Bicentenario. San Salvador: Ministerio de Educación, 253 pp.
ISBN: 978-99983-56-13-9 / 978-99983-56-14-6.
Breve semblanza del autor y contexto del libro
Adolfo Bonilla Bonilla nació en San Vicente, El
Salvador, en 1955. Graduado de Máster en Artes por la Universidad
de Londres, Inglaterra, en 1999. Realizó un Doctorado en Filosofía
Política en la Universidad de Manchester, Inglaterra, en 1996,
y estudios posdoctorales en la Universidad de Johns Hopkins
en Baltimore, Maryland, Estados Unidos, en 1998. El texto se
publica en el marco de la celebración de los 200 años del proceso
de independencia de España en el área centroamericana.
1Doctor en Teología por la Pontificia Universidad Urbaniana de Roma. Director
de la Maestría y Doctorado en Teología de la UDB. Correo electrónico: juan.
chopin@udb.edu.sv
96 Los procesos de independencia de Centroamérica. Una
interpretación de sus proyectos en el Bicentenario, de
Adolfo Bonilla Bonilla
Contenido y estructura del texto
La tesis central del libro consiste en presentar de forma
más actualizada y enriquecida, con nuevas fuentes documentales
y nuevos conceptos, una crítica a la historia de las ideas políticas
basada en la dicotomía servil-liberal. También presenta una
clasificación novedosa de ideas políticas, de la cual resulta
una nueva historia política e interpretación de los procesos
de independencia, donde la independencia se presenta como
ilustrada, liberal y republicana.
La obra se estructura en cuatro capítulos y la conclusión.
El primer capítulo (Las ideas de la Ilustración y su influencia en
los procesos y proyectos de independencia) analiza la influencia
de las ideas ilustradas en los procesos de independencia. “Esta
sección es importante para comprender la filosofía política detrás
de los proyectos de modernización del Imperio español” (p. 23).
Se desarrollan dos grandes variantes: el absolutismo ilustrado y la
ilustración constitucional.
En el segundo capítulo (Proyectos de independencia y
constituciones en el ámbito americano)
se presentan casos notables de proyectos de independencias
y sus procesos y propuestas constitucionales para ilustrar lo
complicado que fue tomar decisiones sobre esos temas. Se
analizan las propuestas del conde de Aranda, luego las de
los venezolanos Francisco de Miranda y Simón Bolívar, la
de los guatemaltecos José María Peinado y Antonio García
Redondo, y finalmente la propuesta de proyecto de canal
interoceánico en Nicaragua, presentada en 1826 por José
Cecilio del Valle al congreso de la república federal de
Centroamérica, que aborda el tema de la independencia y
la economía (pp. 35-36).
El tercer capítulo (El fin del antiguo régimen hispano, la
Constitución española de 1812 y su relación con los procesos de
independencia en Centroamérica), el más extenso,
TEORÍA Y PRAXIS No.42 Vol. 1 Enero-Junio 2023 97
analiza el esfuerzo de creación del Estado moderno desde
la invasión napoleónica a España hasta la redacción de la
Constitución española de 1812 y su puesta en práctica. Ello
incluye el proceso de las cortes de Cádiz, la revolución
liberal española y el fin del antiguo régimen, la Constitución
española de 1812 y su implementación en Centroamérica. En
ese contexto se analiza el ´primer grito de independencia´
del 5 de noviembre de 1811 en San Salvador y el levantamiento
en dicha ciudad del 24 de enero de 1814 (p. 21).
Digno de mención es el análisis que hace el autor del artículo
18 de la Constitución de Cádiz:
A este artículo no se le ha dado la importancia que merece,
ya que representa quizá el cambio más radical de la época
en materia de definición de la nación, la ciudadanía política
y los derechos individuales. Por este decreto, el indígena
pasó de indígena conquistado marginado y segregado en los
pueblos de indios, sometido, a pagar tributo y a trabajos
forzados, a ser parte de la nación española, a ser parte de
la configuración de la soberanía nacional o popular, a gozar
de ciudadanía política (p. 79).
El otro elemento es la explicación de cómo surge la tradición
del primer grito de independencia. El tercer aspecto por resaltar
de este capítulo es el análisis que el autor hace de la obra de
Alejandro Dagoberto Marroquín. Por ejemplo, Bonilla sostiene que
Marroquín en su narración no está presentando al líder
histórico Pedro Pablo Castillo, sino que está construyendo al
personaje ideal revolucionario, que él imagina con perfectos
atributos que el mismo Castillo no tenía, para su propósito
de crear un personaje histórico revolucionario con orígenes
populares que sea útil políticamente a la revolución que
se estaba gestando en la década de 1960 en El Salvador. Es
lo mismo que están haciendo Jorge Arias Gómez y Roque
Dalton (pp. 129-130).
98 Los procesos de independencia de Centroamérica. Una
interpretación de sus proyectos en el Bicentenario, de
Adolfo Bonilla Bonilla
Finalmente, intenta recuperar la figura de José Cecilio
del Valle, a quien considera “una figura controversial, [pero]
considerado como la personalidad más importante en la Ilustración
centroamericana. Su brillante carrera fue oscurecida por su apoyo
a la monarquía absoluta durante el hostil período de Bustamante,
en 1814-1818” (p. 149).
El cuarto capítulo (La independencia centroamericana
de España, la anexión al Imperio mexicano y la independencia
centroamericana de México, 1820-1823)
analiza el restablecimiento de la Constitución de Cádiz
en 1820, el debate electoral de 1820 y la adopción en
Centroamérica de la clasificación de las ideas servil-liberal,
la independencia de España el 15 de septiembre de 1821,
la anexión al Imperio mexicano del 5 de enero de 1822, la
resistencia de la provincia de San Salvador a la anexión a
México y la independencia de Centroamérica con relación a
México el 1 de julio de 1823 (p. 21).
Uno de los aportes más notables en este capítulo es aclarar
la confusión terminológica e histórica que ha provocado la
introducción del binomio servil-liberal por Barrundia en El Editor
Constitucional, número 1 y 3, del 2 de agosto de 1820. Así, sostiene
Bonilla: “la definición de servil de Barrundia no tiene nada que ver
con el pensamiento conservador y que por ello fue un error usarlas
como sinónimos de la manera que se hizo a finales del siglo XIX” (p.
168). Además, agrega: “Mi contribución consiste en mostrar que la
postura exclusivista de Barrundia quedó claramente establecida
en el debate electoral de 1820 y está directamente ligado a su
lectura e influencia de Rousseau” (p. 173). Destacamos también la
recuperación que hace, en sintonía con Mario Vásquez Olivera, del
“prócer olvidado”, un tal “fray Tasajo”; se trata de Rafael Castillo,
“un fraile agustino veterano de las luchas de Miguel Hidalgo que
decidió luchar en las filas republicanas de San Salvador y lo hizo
de manera brillante” (p. 213). Finalmente, un tema que interesa
a los historiadores es el cisma formal en que incurrió José Matías
Delgado, ante la creación del obispado de San salvador el 30 de
marzo de 1822. Destaca en este punto el estudio realizado por Luis
Ernesto Ayala Benítez.
TEORÍA Y PRAXIS No.42 Vol. 1 Enero-Junio 2023 99
Adolfo Bonilla nos proporciona una sugerente conclusión.
Por una parte, confirma su tesis:
que nuestros procesos de independencia estaban guiados
por la revolución ilustrada que transcurrió dentro de
los parámetros del absolutismo ilustrado, el liberalismo
y el republicanismo. Por tanto, nuestra independencia
fue ilustrada, liberal y republicana. Una independencia
conservadora no tenía lugar en razón de que, en
Centroamérica, por el peso avasallador de la Ilustración y
por la estructura social, no se desarrolló el pensamiento
conservador (p. 231).
Por otra parte, propone un método para retomar estas
investigaciones, que en términos generales consiste en “separar
las interpretaciones y comentarios sobre las independencias que
se hicieron en la época de la independencia, de las que se hicieron
a partir de la segunda mitad del siglo XIX y siglo XX” (p. 232). De
hecho, sugiere una serie de fuentes y referencias que a su juicio
son indispensables para tal cometido.
La obra de Adolfo Bonilla va más allá de la lectura fáctica
de los acontecimientos históricos. Su lectura razonada de las ideas
filosóficas que sustentan los hechos históricos le da al texto un
enfoque interesante, respecto de los manuales tradicionales de
historia. Cabe preguntarse si su propuesta de leer los procesos
de independencia en Centroamérica a partir de la modernidad
ilustrada pueda equilibrar la invención de tradiciones que
normalmente encontramos en el proceso de creación de las
naciones centroamericanas.